Visitar Salvador es realizar un viaje por la historia de Brasil. En el Centro Histórico de la ciudad, podemos admirar la mayor área conservada de arquitectura portuguesa fuera de Portugal. Un local encantador, extremamente rico en monumentos históricos con fechas del siglo XVII hasta el siglo XIX. Subir y bajar por sus calles de piedra oyendo el sonido de los tambores es algo común en las cuestas del Pelourinho. En el “Terreiro de Jesus”, podrá disfrutar de presentaciones de capoeira y saborear un delicioso acarajé. Además de la mezcla de razas, religiones y culturas, la primera capital de Brasil posee una atmosfera única que contagia tanto a brasileños como a extranjeros que la visitan
Desde la Ribeira hasta el Flamengo son 50 km de bonitas playas rodeadas de cocoteros, arenas blancas y aguas cristalinas.
El azul del mar de una de las playas más famosas del mundo, la del Porto da Barra, hará que te enamores todavía más de nuestra ciudad.